"A través de lo artificial, se llega a lo auténtico (genuino) [1]" (Talmud Babilónico, Volumen Pesajim 50b). Sin embargo, hay que saber que, si la persona no se esfuerza en dirigir sus actos, con la intención de acercarse a lo auténtico... solo {en forma automática}... no va a llegar.
La persona puede aumentar en mitzvot y en buenos actos, todos los dias de su vida... y, sin embargo... no moverse un ápice, en dirección a lo esencial (interior), y lo artificial {lo no auténtico} en él, mantenerse inmutable {sin cambios}
Y por eso explicamos antes (en el maamar "La generación de lo artificial", que sólo si hay una partícula {un punto} de autenticidad dentro de lo artificial {que hay en él}, {recién} entonces, puede la persona llegar a lo auténtico.
Esa partícula {ese punto} de autenticidad, se revela de diversas maneras, pero lo principal es que la persona quiera (inclusive en estos momentos, en que está en un mundo que es completamente artificial {en toda su estructura de valores}), llegar a lo auténtico (genuino); sobre él {sobre esta persona, que tiene este deseo sincero por la autenticidad} recae empujarse a sí mismo, a la fuerza, a entrar en los portales de la autenticidad.
Todos vivimos instantes así... cuando tenemos la mano ya estirada para agarrar la 7ma empanada, o tenemos algo delante de los ojos que no debemos mirar, o... cualquier cosa de ese estilo... la sensación de que uno debe tomarse a sí mismo y moverse hacia otro lugar (en los ejemplos anteriores, bajar la mano que apuntaba a la empanada o desviar la vista...)
Dos categorías de "no auténtico"
Nuestros sabios de bendita memoria aludieron a ésto en la cuestión del enfrentamiento entre Iaakov y Esav (que contiene el tema del intento {el esfuerzo} de la persona por vencer su mala inclinación) cuando dijeron: "se preparó {para dicho enfrentamiento} de tres maneras: con regalos, con plegaria y alistándose para la guerra (según el comentario de Rashi)".
Los regalos que la persona presenta a su mala inclinación, son todas las tentaciones de lo artificial (no auténtico): la seguridad de un sueldo, el miedo al castigo y lo placer que puede encontrar en su trabajo para el creador {el Rab habla acá del cumplimiento de preceptos por razones no auténticas}.
La plegaria, es la expresión del fuerte {y sincero} deseo de entrar en lo esencial (interior), y
la guerra, es la guerra con la mala inclinación y el intento {esfuerzo} de anular el ego, anular las aspiraciones del mundo artificial.
Este es el orden {entonces} de la lucha por la elevación:
a) regalos: lo artificial {pago, placer, etc... lo visto arriba}
b) plegaria: de ella viene la aspiración artificial pura, ya que nos fue asegurado que, la plegaria sincera por la espiritualidad, no retorna vacía, en todo momento y en toda época (y ésto es una gran bondad, que H' bendito sea, reciba la plegaria y la transforme en fuerza que puede germinar la aspiración espiritual, inclusive que la persona aún se encuentre inmersa en el materialismo)
c) guerra: porque del fortalecimiento de la aspiración espiritual, germina la anulación del ego del mundo artificial.
Qué bien que viene este maamar antes de Rosh haShaná... la coronación del Rey... el dia en que nuestro trabajo es, fundamentalmente, la anulación de nosotros mismos, la aceptación (recepción gozosa), de la potestad, de la majestad de H', del creador; la anulación de nosotros mismos (minúsculas partículas perdidas en el universo, realidades insignificantes), y nuestra aceptación del propósito de la creación.
Entre paréntesis, creo que, lo opuesto a ésto, la resistencia que oponemos, permanentemente, a la realidad amplia, general y total de la creación y, sobre todo, al propósito y a la dirección de la creación, es la fuente de tanto dolor y sufrimiento.
¡ Cómo no vamos a tener dificultades en la vida si nos pasamos toda ella nadando contra la corriente !!
Pero.. en Rosh haShaná, en el aniversario de la creación del mundo, tenemos una nueva oportunidad para acallar nuestro griterío interno (y el celular, también) y anularnos (por supuesto que eso no significa desaparecer... algún dia, si Di-s quiere, hablaremos de eso) y pedir espiritualidad, como dijo el Rab, y meternos (a la fuerza) en lo esencial (interior).
Después de los regalos (la comida rica de la noche de Rosh haShaná), sumerjámonos en la plegaria y lancémonos a la guerra, y que sea un nuevo y gran dia, el primero de una nueva realidad, de un nuevo y gran mundo, un mundo real, honesto y esencial (interior)
Shabat Shalom, ktivá vajatimá meod tová
Desde Giv'at Ze'ev, Israel - 14-Sep-2012
NOTAS:
[1] Ver el maamar "Lo esencial (interior) y lo superficial - La generación de lo artificial" para una explicación de esta frase
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